
Cine accesible para todos los sentidos y más
El cine, como arte y como experiencia colectiva, debería estar al alcance de todas las personas. Sin embargo, en pleno siglo XXI, las barreras de acceso siguen excluyendo a miles de espectadores por motivos sensoriales, físicos o cognitivos.
En Curuxa Cinema creemos que la accesibilidad no es un añadido, sino un derecho cultural básico. Por eso, en esta entrada, queremos hablar sobre la importancia de construir un cine verdaderamente inclusivo y accesible para todos los cuerpos y sentidos.
¿Qué es el cine accesible?
Hablamos de cine accesible cuando las películas, las salas, los eventos y las plataformas están adaptados para que personas con diversidad funcional puedan disfrutar de la experiencia en igualdad de condiciones. Eso implica tanto recursos técnicos como cambios de actitud y estructuras.
Las principales herramientas de accesibilidad audiovisual incluyen:
- Subtítulos accesibles (para personas sordas o con dificultades auditivas). Incluyen no solo diálogos, sino también descripciones sonoras relevantes (como [música], [teléfono suena], etc.).
- Audiodescripción (para personas ciegas o con baja visión). Una voz en off describe lo que ocurre visualmente en pantalla durante los silencios.
- Lengua de signos incorporada en pantalla o en sesiones especiales con intérprete.
- Salas adaptadas físicamente, con accesos, espacios reservados y señalización adecuada.
¿Por qué es tan urgente hablar de esto?
En muchos países, entre ellos España, la accesibilidad audiovisual está reconocida legalmente. Pero en la práctica sigue siendo la gran asignatura pendiente del sector cultural. La falta de voluntad política, presupuestos limitados o desconocimiento técnico hacen que la mayoría de las salas y películas no estén adaptadas.
Esto significa que millones de personas —sordas, ciegas, con movilidad reducida o con discapacidad intelectual— se ven sistemáticamente excluidas de una de las formas de arte más populares y universales del mundo.
Accesibilidad no es solo “tecnología”: también es cuidado
Hablar de cine accesible es también hablar de cómo organizamos lo cultural: desde cómo se programa una película hasta cómo se da la bienvenida al público. En este sentido, los valores del feminismo, el cuidado y la empatía son fundamentales para construir experiencias culturales más justas.
Una sesión adaptada no es solo una herramienta técnica: es una declaración política de que todas las vidas y formas de percibir importan.
Proyectos que inspiran
Algunas iniciativas y festivales están marcando el camino hacia una cultura más accesible:
FESTIVAL INCLÚS (Barcelona)
Especializado en cine y discapacidad, con proyecciones 100 % accesibles.
Museos, centros culturales y salas autogestionadas
Que programan cine con medidas de accesibilidad incorporadas, como por ejemplo:
Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (España), Signtific (Reino Unido).
Proyectos de cine participativo con personas con diversidad funcional
Como herramientas de expresión y empoderamiento como por ejemplo:
La Rara Troupe (España), Fundación INTRAS (España)
El papel de Curuxa Cinema
Desde Curuxa Cinema, trabajamos para que la cultura sea realmente un derecho para todas las personas. Esto implica pensar nuestros espacios, proyecciones y actividades desde una mirada inclusiva, comunitaria y accesible.